En las primeras horas de la tarde de ayer, una fuerte tormenta afectó al norte provincial y causó algunos daños en la vecina localidad de Speluzzi.
En el acceso al pueblo, la intensidad del viento provocó la caída de varios árboles, que obstaculizaron el tránsito vehicular sobre la ruta provincial Nº 101, según informaron a El Diario fuentes policiales.
En la misma población también se registró el derrumbe de un tapial en el destacamento policial y la voladura del techo de una vivienda.
Personal de la cooperativa CORPICO, de la Dirección Provincial de Vialidad y de las unidades policiales de Speluzzi y de la localidad de Vértiz concurrieron al lugar y sumaron sus esfuerzos para poder llegar a despejar la ruta, liberarla y restablecer el normal tránsito por el lugar.
Por otra parte, en la ciudad de General Pico no se reportaron daños de importancia, aunque sí fue espectacular la sucesión de caídas de rayos.
Antes y después de la eléctrica tormenta la jornada fue agobiante, con una sensación térmica de 40 grados centígrados.
La pausa térmica que imprimió la lluvia -de apenas 9 milímetros- fue considerada por los vecinos como exigua, ya que luego de la precipitación pluvial debieron seguir soportando el calor, algunos cortes de energía (como viene sucediendo seguido en la ciudad) y otras incomodidades propias del momento.
En el acceso al pueblo, la intensidad del viento provocó la caída de varios árboles, que obstaculizaron el tránsito vehicular sobre la ruta provincial Nº 101, según informaron a El Diario fuentes policiales.
En la misma población también se registró el derrumbe de un tapial en el destacamento policial y la voladura del techo de una vivienda.
Personal de la cooperativa CORPICO, de la Dirección Provincial de Vialidad y de las unidades policiales de Speluzzi y de la localidad de Vértiz concurrieron al lugar y sumaron sus esfuerzos para poder llegar a despejar la ruta, liberarla y restablecer el normal tránsito por el lugar.
Por otra parte, en la ciudad de General Pico no se reportaron daños de importancia, aunque sí fue espectacular la sucesión de caídas de rayos.
Antes y después de la eléctrica tormenta la jornada fue agobiante, con una sensación térmica de 40 grados centígrados.
La pausa térmica que imprimió la lluvia -de apenas 9 milímetros- fue considerada por los vecinos como exigua, ya que luego de la precipitación pluvial debieron seguir soportando el calor, algunos cortes de energía (como viene sucediendo seguido en la ciudad) y otras incomodidades propias del momento.
1 comentario:
Saludos, muy interesante el articulo, espero que sigas actualizandolo!
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